La primera de aquellas tardes fue la del 3 de marzo de 2010, hace más de 11 años, en un amistoso entre Italia y Camerún (0-0) disputado en Mónaco. Desde el verano de 2010, los dos centrales italianos han compartido siempre vestuario a excepción de la temporada 2017-18. Los enfrentamientos de Bonucci con el entonces entrenador de la Juventus, Massimiliano Allegri, provocaron su salida del club con destino al Milan, en uno de los traspasos más extraños de los últimos tiempos. Tras su lesión, que le mantuvo inactivo durante un año, sólo han compartido alineación en la Juventus en 12 ocasiones. La marca alemana dio a conocer la flamante indumentaria que será estrenada este viernes ante Macedonia de una manera particular, ya que solo el arquero Gianluigi Buffon la lucirá, a modo de homenaje al veterano portero de la Juventus que podria disputar en Rusia 2018 su sexta Copa del Mundo.
La primera es blanca con la banda azul, mientras que la segunda combina dos tonos de azul. En este Mundial, la firma alemana presenta unos diseños no tan extraordinarios como en otras veces, pero ese sol de la primera equipación y romper con la monocromía en la segunda (el pantalón es celeste) bien merecen más que un suficiente. El problema es que la primera es bastante sosa, pero el pantalón verde me alegra la vista. Eso sí, si se atreven a presentarla en Rusia con pantalón amarillo, se llevarán mi aplauso. La anfitriona Rusia también estrenará una camiseta para la gran cita que va a organizar en su país. Viviremos una nueva edición de la Liga de Naciones de la UEFA, además de la esperada Eurocopa 2020 que finalmente se celebrará en 2021. Todo esto para disfrutar del fútbol a nivel nacional con las selecciones de cada país. El mensaje que quiere transmitir el equipo ruso con esta camiseta es la unión entre la gente, el fútbol y la bandera de su país.
A Italia se le pueden achacar muchas cosas, pero que sudan la camiseta y juegan por y para la selección es un hecho que no se puede negar, en España hay mucho que se quiere lucir para poder terminar jugando en algín equipo grande. En Italia 1990 España se quitó las rayas amarillas de las mangas y las puso en el cuello de pico. Italia triunfa, Italia fracasa, Italia renace y Leonardo Bonucci y Giorgio Chiellini siguen siempre ahí, hilos conductores entre el ocaso de la generación campeona del mundo de Buffon, Gattuso, Pirlo y De Rossi y la eclosión de la emergente y modernizada Nazionale de Donnarumma, Jorginho, Verratti e Insigne que amenaza el martes a España. La grave lesión en la rodilla de Chiellini en agosto de 2019 impidió el interesante experimento futbolístico de comprobar su respuesta sobre el campo a la radical apuesta por la posesión de Maurizio Sarri. Chiellini fue campeón del mundo en 2006, pero la cima para Bonucci fue la final de la Eurocopa de 2012. Esa fue la única derrota de ambos contra España -al margen de las semifinales de la Confederaciones de 2013, ganadas por la selección de Del Bosque a penaltis- en sus cinco enfrentamientos compartiendo defensa, en los que figuran dos victorias, la de los octavos de la Euro de 2016 y un amistoso en 2011. En la otra orilla de Wembley estarán Pau Torres y Laporte, apenas seis partidos en común, cuatro con ambos de titulares.